La planificación en la empresa comunicacional
Para el buen desempeño de una empresa u otra institución dedicada a la comunicación, se debe proveer una serie de actividades previstas con anticipación. Todos los procesos deben estar debidamente registrados y medidos en tanto su ejecución. En este contexto, es preciso realizar el diseño de un sistema de planificación, seguimiento y evaluación (PSE).
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Cada empresa comunicacional debe escoger el método de planificación que más se adecue a sus requerimientos y objetivos. La planificación es un proceso que debe realizarse de manera colectiva, entre todos los miembros del equipo, utilizando para tal efecto métodos altamente participativos y mecanismos de sistematización adecuados.
Por otra parte, el seguimiento sirve para sistematizar los datos e información resultante del trabajo institucional y los cambios que se producen en una determinada realidad, a partir de la ejecución de lo planificado. La evaluación de las actividades desarrolladas por la empresa de comunicación sirve para cotejar: lo propuesto (a partir de la planificación) y lo que se tiene como logros.
De la misma manera, a partir de la planificación, se puede llegar a conocer los efectos que se producen en la realidad. Ello depende significativamente de la magnitud que tenga la empresa comunicacional, su grado de influencia y efectos que provoca en un determinado segmento de la sociedad, La planificación en la empresa comunicacional se entiende como un proceso complejo, que parte, en tanto su ejecución, de algunos referentes que nacen del contexto en el que se desempeñan labores, sus objetivos y lo más importante la manera de lograrlos. En este sentido es imprescindible que se puedan establecer los mecanismos de evaluación adecuados. La evaluación es vital en todo proceso de planificación, en tanto permite establecer muy claramente si se han logrado alcanzar los objetivos planteados. La evaluación debe ser durante el proceso y al finalizar todo. Muchas instituciones utilizan la evaluación: SUMATIVA y FORMATIVA.
Los documentos mínimos que se deben elaborar dentro de una institución o empresa de comunicación son los siguientes:
- El Plan Marco: Que consigna la información de las actividades que se abordarán en un lapso (recomendable) de 3 a 5 años como máximo, no se tendría que abarcar más tiempo, siendo que en la realidad pueden haber cambios significativos.
- El Plan Operativo Anual (POA), es de desglose del documento anterior. Desarrolla con precisión actividades concretas que se deben llevar adelante a lo largo de una gestión.
- Las matrices de trabajo: Con esta herramienta se sintetiza la información y se la hace operativa. Para hacer un taller, implementación tecnológica, capacitación a recursos humanos, etc. se requiere de la utilización de matrices, que permiten hacer un seguimiento al impacto que tienen actividades concretas, en el marco de la planificación en general.
Cada empresa comunicacional debe escoger el método de planificación que más se adecue a sus requerimientos y objetivos. La planificación es un proceso que debe realizarse de manera colectiva, entre todos los miembros del equipo, utilizando para tal efecto métodos altamente participativos y mecanismos de sistematización adecuados.
Por otra parte, el seguimiento sirve para sistematizar los datos e información resultante del trabajo institucional y los cambios que se producen en una determinada realidad, a partir de la ejecución de lo planificado. La evaluación de las actividades desarrolladas por la empresa de comunicación sirve para cotejar: lo propuesto (a partir de la planificación) y lo que se tiene como logros.
De la misma manera, a partir de la planificación, se puede llegar a conocer los efectos que se producen en la realidad. Ello depende significativamente de la magnitud que tenga la empresa comunicacional, su grado de influencia y efectos que provoca en un determinado segmento de la sociedad, La planificación en la empresa comunicacional se entiende como un proceso complejo, que parte, en tanto su ejecución, de algunos referentes que nacen del contexto en el que se desempeñan labores, sus objetivos y lo más importante la manera de lograrlos. En este sentido es imprescindible que se puedan establecer los mecanismos de evaluación adecuados. La evaluación es vital en todo proceso de planificación, en tanto permite establecer muy claramente si se han logrado alcanzar los objetivos planteados. La evaluación debe ser durante el proceso y al finalizar todo. Muchas instituciones utilizan la evaluación: SUMATIVA y FORMATIVA.
Los documentos mínimos que se deben elaborar dentro de una institución o empresa de comunicación son los siguientes:
- El Plan Marco: Que consigna la información de las actividades que se abordarán en un lapso (recomendable) de 3 a 5 años como máximo, no se tendría que abarcar más tiempo, siendo que en la realidad pueden haber cambios significativos.
- El Plan Operativo Anual (POA), es de desglose del documento anterior. Desarrolla con precisión actividades concretas que se deben llevar adelante a lo largo de una gestión.
- Las matrices de trabajo: Con esta herramienta se sintetiza la información y se la hace operativa. Para hacer un taller, implementación tecnológica, capacitación a recursos humanos, etc. se requiere de la utilización de matrices, que permiten hacer un seguimiento al impacto que tienen actividades concretas, en el marco de la planificación en general.
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